KPIs más importantes para una buena gestión del almacén.
KPI 1: Cumplimiento
El cumplimiento comienza con la colocación del pedido y termina con el despacho de los bienes al cliente. Hay varias métricas que se deben evaluar dentro del proceso de cumplimiento de pedidos:
Tasa de cumplimiento de pedidos: mide el porcentaje del pedido que se ha completado. Una tasa de cumplimiento aceptable típicamente es del 97-98%. Cualquier valor por debajo del 94% probablemente se deba a ineficiencias en las operaciones del almacén y en los procesos de reposición.
Oportunidad en el cumplimiento de pedidos: evalúa el tiempo de cumplimiento del pedido. En el mercado actual, este puede ser desde 2-3 días hasta unas pocas horas desde la colocación del pedido hasta el despacho desde el almacén.
Piezas por hora: es la métrica principal de salida que analiza el rendimiento y la eficiencia del equipo de recolección. Se espera que un recolector promedio recoja entre 120 y 175 piezas o cajas por hora, con los mejores recolectores logrando más de 250 piezas por hora. La aplicación de tecnologías avanzadas como la recolección por voz puede aumentar las tasas de recolección en un 30%.
Entrega a tiempo y completa (OTIF): identifica qué tan bien se alcanzan los objetivos de entrega en términos de recibir el pedido completo en la fecha deseada. Incluso si se logran todas las KPIs anteriores de manera óptima, si los bienes no se entregan a tiempo, afectará negativamente el negocio. Los envíos típicos OTIF deberían ser al menos del 98-99%.
KPI 2: Exactitud del inventario
La exactitud del inventario físico debe corresponder con el listado en los datos, pero en realidad, a menudo hay una disparidad entre ambos en cualquier gran centro de distribución. Una alta tasa de inexactitud del inventario puede resultar en pedidos pendientes inesperados; clientes insatisfechos; y, en última instancia, mayores costos generales. La exactitud del inventario se puede mejorar realizando verificaciones regulares contra la base de datos y utilizando conteo cíclico como un medio para validar continuamente los registros de la base de datos.
KPI 3: Rendimiento general
El rendimiento del almacén se refiere al número de unidades que se procesan y mueven diariamente. Para calcular la tasa de rendimiento, se debe rastrear el movimiento de bienes a través del almacén durante un período de tiempo determinado. Por ejemplo, para medir cuántos pedidos se procesan en un turno de ocho horas, se debe rastrear el número de pedidos recibidos en ese período y cuánto tiempo tarda cada producto en moverse desde la recolección hasta el empaquetado y etiquetado. Por ejemplo, si un almacén procesa 400 pedidos en ocho horas, los trabajadores están completando un promedio de 50 pedidos por hora.
KPI 4: Reposición
La reposición es el movimiento de inventario desde una ubicación de almacenamiento central o de reserva hasta los contenedores de almacenamiento primarios para un movimiento posterior. Esta métrica es muy importante para almacenes que manejan múltiples productos en grandes volúmenes, especialmente en entornos de comercio electrónico. La métrica de reposición monitorea los métodos utilizados para llevar a cabo este movimiento y la eficiencia de los procesos involucrados. Con técnicas de reposición efectivas, las empresas pueden evitar exceso de stock y stock muerto, eludir faltantes, asegurar entregas a tiempo, rotar productos correctamente y mantener un stock de seguridad adecuado.
KPI 5: Exactitud de pedidos
La misión de cualquier operación de almacén es asegurar que el cliente reciba los bienes que ordenó dentro del período de tiempo que desea. Una parte clave de OTIF, la exactitud de pedidos, es una de las métricas más importantes que un almacén debe medir diariamente. Las operaciones de almacén de clase mundial apuntan a una exactitud de pedidos del 99.5-99.9%.
KPI 6: Rotación de inventario
La relación de rotación de stock se utiliza para identificar con qué frecuencia y qué tan pronto se recibe, ordena, procesa y entrega un artículo de stock dentro de un período determinado. Esta es una medida importante de la salud del inventario de una empresa y de los procesos de pedidos. La rotación de inventario se puede rastrear en un sistema de gestión de almacenes, lo que da a los usuarios la capacidad de tratar diferentes tipos de inventario de manera diferente. Por ejemplo, al realizar conteo cíclico de inventario, se pueden contar los artículos de movimiento rápido con más frecuencia que los de movimiento lento, aplicando esfuerzos laborales donde pueden tener el mayor impacto, en lugar de tratar todos los artículos de inventario con los mismos procesos de gestión.
KPI 7: Stock muerto
El stock muerto es inventario que no se está moviendo debido a la falta de demanda por estar dañado, expirado o no vendible. Se encuentra en el almacén ocupando espacio y consumiendo capacidad. La mejor práctica aquí es rastrear el stock muerto y luego crear incentivos de venta para mover estos bienes fuera del almacén.
KPI 8: KPIs de proveedores
Medir los KPIs de los proveedores es crítico para desarrollar una adquisición de clase mundial. Puede fomentar una mejor comunicación, aumentar la visibilidad del gasto y de los pedidos, mejorar las eficiencias de los procesos, identificar oportunidades de ahorro de costos y más. Las mediciones de KPIs de proveedores a considerar incluyen fiabilidad, rendimiento, cumplimiento y servicio al cliente.